miércoles, 25 de enero de 2017

Francmasonería y esoterismo (Parte II)



Continuamos con la segunda parte del articulo "La franc-maçonnerie et l'ésotérisme" de Roger Dachez, 

¿Cuál es la naturaleza del simbolismo masónico?

Para continuar con nuestra exposición, debemos de recurrir a las fuentes del simbolismo masónico, pues estás nos pueden arrojar luz sobre la naturaleza de un supuesto esotérismo. La referencia a la masonería operativa es inevitable, uno puede preguntarse si, en la época de las grandes construcciones medievales, tuvo lugar un debate esotérico en las logias. Tal cuestionamiento, sin embargo, parece no tener sentido. No hay evidencia alguna, que nos lleve a asumir que existió algún tipo de enseñanza de naturaleza mística entre los trabajadores de las catedrales. Las logias transmitían los secretos del oficio y el arte de la construcción; que era considerable y valioso, por lo cual, era celosamente preservado y en cierta medida oculto, pero esto no significa que fuera esotérico. Por lo demás, los trabajadores eran supervisados ​​cuidadosamente por los sacerdotes, quienes a menudo eran sus patrones, los cuales redactaron los textos más antiguos del periodo operativo, los cuales contienen prescripciones morales destinadas a la edificación de su rebaño.

Sin duda, un simple interpretación moral puede haber surgido entre los trabajadores, que pudieron haber visto en las herramientas de su trabajo, una significancia más. Un ejemplo, se encuentra en una pila de un puente cerca de Limerick en Irlanda, en una estructura metálica, fechada en 1507, que contiene la siguiente inscripción: "Voy a tratar de vivir con amor y cuidado, como el nivel y la escuadra"; un simbolismo moral, sin duda, en un contexto operativo claro, pero estrictamente hablando,tiene un enfoque esotérico?

Por lo tanto, hay que admitir que el simbolismo masónico en toda su exuberancia, su diversidad, con sus connotaciones esotéricas, es una creación posterior al período operativo. La dimensión esotérica de la masonería, quizás se introdujo a finales del siglo XVI, aunque lo más probable es que fuera durante el siglo XVII, cuando se quiso crear a partir del viejo modelo de organizaciones empresariales, una nueva empresa dedicada a la filantropía, con una fuerte inclinación a la especulación filosófica. Incluso se podría decir que el simbolismo masónico existía antes de la masonería especulativa, pero fuera de cualquier contexto profesional y operativo. Así, en los principales tratados de arquitectura renacentista, que son esencialmente el trabajo de aficionados, de diletantes, es común adjudicarles a las tres órdenes principales de la arquitectura: el dórico, el jónico y el corinto, interpretaciones morales o espirituales. En uno de los principales tratados del siglo Francés,  Les Livres de l’Architecture de Philibert de l’Orme, publicado en 1648, se puede leer una sección entera dedicada a la simbología de la cruz. El retrato que traza del arquitecto ideal es una especie de prefiguración del masón del siglo XVIII: amante de las cosas antiguas y por supuesto de la arquitectura, pero también era un filósofo, teólogo, e incluso versado en ciencia y medicina. Este es el ideal de eruditos, que se planteaba en las filas de la Real Sociedad desde su fundación, ideal del cual, Robert Moray, como hemos dicho, era el modelo. También hay que mencionar una corriente literaria que tuvo un gran éxito durante todo el siglo XVI e incluso en el siglo XVII, la cual consistía en  la compilación de cientos de figuras enigmáticas combinadas con una virtud o una cualidad. Muchos de estos "símbolos" se reunirá unas décadas más tarde, en la decoración de las logias masónicas.

Teniendo en cuenta las fuentes identificables del símbolos masónico, es poco probable que desde sus inicios se les halla concedido un contenido místico o iniciatico. Citamos las palabras de Ramsay en 1737: "No tenemos secretos; son signos figurativos y palabras sagradas, que componen un lenguaje a veces mudo, a veces muy elocuente, con el objeto de comunicaren forma amplia y así, reconocer a nuestros hermanos en cualquier idioma o cualquiera que sea su país". Por lo cual, el esoterismo es una reinterpretación tardía, y francamente bastante reciente; podríamos comparar estos símbolos recogidos en los tableros de trazado, como una forma de meditación que busca la apertura de una experiencia interior. Si esta evolución se ha producido en algunas espíritus, es probable que sea debido a que estas figuras y tableros desempeñan un papel importante en las ceremonias durante las cuales, les fueron conferidos los grados masónicos. En el contexto masónico, el esoterismo finalmente nos retrotrae a la iniciación.

3. ¿Es el ritual de iniciación masónica un esoterismo?

Si nos remitimos a los textos más antiguos, incluyendo el grupo de manuscritos escoceses Haughfoot (1696-c.1720), las ceremonias masónicas de la época pre-especulativa eran bastante simples. Las logias era un lugar orientado, donde algunos objetos relacionados con la albañilería eran presentados al candidato el cual se encontraba con los ojos vendados, tras lo cual, recibía la luz. Luego se le comunica, a condición de que prestará un juramento solemne acompañado de terribles castigos, los secretos de su grado, en este caso la Mason Word. No se mencionaba ninguna otra instrucción.

Sin embargo, desde la década de 1730 en Inglaterra y luego en Francia, un nuevo movimiento se erigió, llegando rápidamente a alcanzar una escala considerable: los altos grados. A lo largo del siglo XVIII, decenas y decenas de rituales, fueron escritos, estando la mayoría de las veces inspirados en las leyendas de la Biblia, los cuales, estaban poblados por nuevos símbolos tomados de todas las fuentes, llenos de palabras de un hebreo más o menos exacto; rituales que sumergieron a los masones en un mundo extraño y confuso. Leer miles de manuscritos que aún existen en los archivos masónicos de Europa, dejan una impresión mixta. De esta confusa variedad de documentos, es difícil extraer algunas piezas valiosas. La historia nos dice también que muchos de estos grados se inventaron y se vendieron a bajo precio por aventureros, que hicieron una especie de negocio de la masonería. Incomprensibles palabras que contiene extravagantes signos que supuestamente revelan - según los autores anónimos de estos rituales -  grandes verdades espirituales, que el masón debe de trabajar por descubrir. 

Sin embargo, este método nos permite precisar el lugar que ocupo el esoterismo en el ritual masónico: la información recopilada nos señala que el ritual sólo conduce al candidato a una experiencia, una especie de drama sacro, misterio - en el sentido medieval del término - que debe despertar en él, resonancias espirituales y abrir las puertas a un mundo místico. Es un frase común en la masonería, afirmar que el verdadero secreto de la Masonería no está en las "palabras, signos y toques" impartidos por los grados, sino en la experiencia íntima del destinatario. El secreto, entonces, es realmente incomunicable e inviolable, auténticamente esotérico. Esta concepción también ayuda a justificar el aparente absurdo de ciertos rituales, así como las historias confusas que incluyen, porque no es el sentido literal lo que importa, sino el profundo significado existencial, vivido por el candidato en su corazón. A inicios del siglo XVIII, en sus memorias, Casanova abordo este tema en profundidad.

La naturaleza exacta de esta experiencia íntima, sin embargo, sigue siendo objeto de debate. Una vez más, uno puede oponer de forma esquemática al diseño de Guénon, que ve en el proceso de iniciación, una transmisión de una "influencia espiritual" en relación con una "constitución sutil" del ser humano; una interpretación más común, una fuerte psicologización, que aproxima el ritual masónico a las técnicas utilizadas en el psicoanálisis, asociaciones a ideas, sueños despiertos o psicodramas.

Esa visión esotérica de la masonería como experiencia iniciación inefable, pone claramente de lado el contenido doctrinal de los rituales, es decir, sus "catecismos" y sus "lecturas" clásicas. Más allá de toda la enseñanza discursiva; es la dimensión de vida que se ve favorecida aquí. Este enfoque no agota la cuestión del esoterismo en la masonería, ya que, a lo largo de la historia, muchos sistemas masónicos han reclamado la posesión de una auténtica doctrina esotérica.


Roger Dachez
Traducción: Yerko Isasmendi

sábado, 21 de enero de 2017

Familiares, fantasmas, duendes, diablitos… Parte I



La creencia en una clase de espíritus con los cuales se puede entrar en contacto tanto en forma casual como a través de invocaciones, con miras a que nos ayuden en calidad de sirvientes y por ende; a través de ellos poder lograr conocimientos y habilidades imposibles para un ser humano es una creencia generalizada en el folclore de Europa y por extensión de nuestro país.

Conocidos bajo diversos nombres y señalados como duendes, ángeles o demonios, las referencias a estas entidades jugaron un rol de relevancia en los procesos contra la brujería llevados a cabo en varios países de Europa. A través de estos procesos judiciales, se pueden trazar algunas líneas generales acerca de estos “espíritus”; líneas que por lo demás, nos abren nuevas interrogantes que de alguna manera pueden encontrar explicación en el rico folclore que ha creído en ellos por siglos. 

Se da por sentado que los familiares(1) son demonios revestidos o si se quiere, ocultos bajo una apariencia inofensiva ya sea de un animal – a menudo de pequeño tamaño – o de un espíritu de apariencia afable e infantil. Pero esta idea no encuentra asidero en el folclore europeo, y por extensión tampoco en el criollo, en donde la figura del “duende” está claramente separada de la del demonio. Lo que nos lleva a preguntarnos, ¿existe una relación entre los familiares y lo demoniaco?, o más bien ¿los familiares están más relacionados a seres de naturaleza intermedia comúnmente llamados duendes o hadas?

Para entender la figura de los espíritus familiares citaré a manera de ejemplos dos famosos casos ocurridos en Escocia, me refiero al caso de la mujer sabía(2) Bessie Dunlop(3) cuyo familiar se llamaba Tom Reid y el de Lady Alice Kyteler(4) y su familiar Robin Artisson(5). Del análisis de estos dos casos dentro del contexto de la brujería podemos extraer interesantes datos.

El espíritu familiar de Bessie Dunlop era según ella el espíritu de un difunto llamado Tom Reid, un ex oficial del Barón John Blair de Dalry, que había muerto en la batalla de Pinkie en 1547. El encuentro de Dunlop con su futuro familiar no fue buscado, puesto que un buen día mientras ella se encontraba en el campo, se topó con un hombre mayor con una barba gris, vestido con un abrigo gris, un sombrero negro y una varita blanca en la mano(6).  A través de los contactos con su familiar, Bessie Dunlop logro sus conocidos poderes de sanación y adivinación(7) que la llevaría a hoguera en 1576, a pesar de ser considerada una bruja blanca. Lo interesante de su familiar no es solamente que se presente como un fantasma, sino que declaro estar bajo las órdenes de la Reina de las Hadas(8), llegando a presentarle al menos a 12 habitantes de dicho reino al cual fue invitada en más de una oportunidad. ¿Realmente Tom Reid, no tenía nada que ver con lo demoniaco?

El primer dato que nos llama la atención es esta relación: familiar – fantasma –hada; relación que pese a nuestra sorpresa está registrada en no pocos procesos contra curanderos en Europa. Podemos citar el caso de Elspeth Reoch, quién declaro que al igual que Dunlop fue visitada por un hombre que venía del reino de las hadas y que en vida había sido John Stewart o el caso de un hombre sabio de Aberdeen, cuyo familiar también estaba bajo las ordenes de la reina de las hadas. 

Sabemos que la asociación de las hadas con los demonios fue bastante ambigua, siendo estas más bien asociadas a los muertos, a mediados del siglo XVII el filósofo Thomas Hobbes afirmó que las hadas eran espíritus y fantasmas que habitan en parajes desolados, en lo profundo de los bosques y en las cuevas. La misma opinión era mantenida por el teólogo escocés James Garden quién afirmaba  que los magos o videntes escoceses, eran personas que conversan con los fantasmas y espíritus, a los que comúnmente se les llamaba hadas. Por la misma época el clérigo Robert Kirk que escribió el famoso tratado sobre las hadas The Secret Commonwealth of Elves, Fauns and Fairies señalo que las hadas eran almas de difuntos, citando muchos relatos de encuentros de fallecidos junto a hadas. 

Pero esta asimilación fantasmas-hadas choca con la tradición del folclore en donde el “buen pueblo” guardar características muy semejantes a las humanas, no tan solo en su apariencia física y vestimenta, sino en cuanto a su manera de vivir, de formar familia y hasta en la forma y estructuración de su reino(9).

Para dilucidar este punto, debemos de recurrir a una tradición no cristiana que nos aporta muchos datos valiosos al respecto. En la tradición musulmana nos encontramos con los Jinns (genios) cuya realidad es un hecho innegable en las sociedades musulmanas ya que su presencia es atestiguada en su libro sagrado el Corán. Pues bien los genios al igual que las hadas viven habitualmente en zonas desoladas, en lo profundo del desierto o bosques, en cuevas o cerca de arroyos o fuentes de agua. Además poseen muchas características humanas no tan solo en el plano psicológico – en lo físico pueden adoptar forma humana a voluntad – sino que también en lo social, pudiendo casarse, tener descendencia, por ende familias, y estar estructurados en sociedades bajo la potestad de un rey; lo que nos lleva a un descripción casi calcada de la que nos ofrece el folclore europeo sobre el mundo de las hadas. 

La historiadora Emma Wilby da una síntesis de las características de las hadas donde señala: “Las hadas también eran capaces de todo el abanico de emociones demasiado humanas: podían sentir ira, odio, celos, simpatía o  alegría - y podrían enamorarse... en un nivel más personal, podían casarse, formar un hogar, disfrutar de las relaciones sexuales y en algunos casos, dar a luz a niños … la sociedad de las hadas estaba presidida por una monarquía,  el rey y la reina de las hadas, a veces acompañado de un séquito de aristócratas … aunque las hadas se asocian a menudo con el paisaje natural, particularmente colinas y cavernas subterráneas, en principio, las hadas podían encontrarse casi en cualquier lugar…(10)” 

Los genios al igual que estos fantasmas-hadas, se pueden presentar sin previo aviso bajo apariencia humana y ponerse al servicio de una persona; pudiendo dotarle de poderes de sanación y videncia. 

Ahora bien, el demonio cristiano encuentra su correlato en los genios en las creencias musulmanas, Satanás (Shaytán en árabe) es un genio en el relato coránico, un genio de muy alto grado – que fácilmente podemos asimilarlo a una especie de rey o incluso emperador de los genios – que se rebela ante la orden de postrarse ante el hombre(11).

Que en estos familiares-fantasmas exista algo demoniaco se comienza a dibujar si vemos a las hadas como jinns; idea que se refuerza por ejemplo en el intento por parte del familiar de Bessie Dunlop de que ella adjurada de su fe cristiana a cambios de bienes materiales que el prometió concederle. La abjuración de la fe a cambio de promesas materiales es un tema que dentro del cristianismo se remonta al mismo Jesús y el conocido relato de las tentaciones en el desierto por parte del demonio(12). Por otra parte, sabemos a través del Pseudomonarchia daemonum(13) que algunos demonios se caracterizan por proporcionar “familiares”; dato que debe ser analizado bajo el pensamiento de la magia ceremonial de la cual forma parte esencial dicho texto. En la magia ceremonial cuando se habla de familiares se está  refiriendo a demonios menores(14).



Yerko Isasmendi 

Parte II



Notas
1) Los espíritus familiares o demonios familiares, fueron entendidos en Europa, al menos desde la Baja Edad Media, como seres sobrenaturales que viven en asociación y sujeción directa a algún hechicero, brujo o mago, al que ayudan de forma permanente.
2) Cunning Folk suele ser traducido como curandero o sanador tradicional, pero dichos términos en nuestras sociedades son asociados a fenómenos que no guardan relación con los Cunning Folk europeos, sino más bien con practicantes de “artes” ligadas a las culturas autóctonas, y por ende, dentro de un marco cultural propio y ajeno al europeo. Muchas veces fueron asociados a la brujería blanca, centrando su accionar en facultades sanadoras y de adivinación. 
3) Conocida injustamente como la bruja de Dalry (Ayrshire), fue quemada en 1576. 
4) Paso a la historia por ser la primera persona acusada y condenada por brujería en Irlanda a inicios del siglo XIV.
5) Los familiares suelen ser mencionados en los procesos de brujería con nombres y apellidos, en algunos casos son nombres de personas supuestamente fallecidas o nombres a los cuales se les ha agregado un apodo.  
6) Son muchos los relatos que nos hablan de un estereotipo de las apariciones de familiares, por ejemplo el caso de Thomas Bégue ejecutado en 1436, quién confesó haber conjurado un demonio llamándolo tres veces «Diablo Mermet»; Mermet apareció primero disfrazado de gato negro y luego como un anciano vestido también de negro, llevando unos cuernos en sus pies. También está el caso de Jeanette, viuda de Hugues Brunier que admitió haber invocado a un demonio llamado Brunet, que se materializo como un perro negro y luego también como un hombre de raza negra vestido de negro.
7) Quizás el último caso registrado es el de Filomena Arias (1865-1938) o más conocida como "bruxa de Torbeo" o más inexactamente "meiga de Torbeo",  que un día al acercarse a una fuente a beber agua fue poseída por 5 espíritus. Con ayuda del párroco del pueblo 2 de estos con aspecto de perros fueron expulsados, aunque los tres restantes de por vida la sometieron a estados alterados en los cuales desplego asombrosos poderes de sanación y videncia.
8) Las hadas (fairy) suelen designar a toda clase de seres sobrenaturales con forma humana y poderes mágicos.
9) Ver Paracelso, en su “Liber de Nymphis, Sylphis, Pygmaeis et Salamandris et de Caeteris Spiritibus".
10) Cunning folk and familiar spirits, pág. 18
11) “.. cuando dije a los ángeles: “Hagan una reverencia ante Adán”. La hicieron, excepto Iblís, que era un yinn, y desobedeció la orden de su Señor. ¿Acaso lo toman a él y a sus descendientes como protectores en vez de tomarme a Mí, a pesar de que son sus enemigos? ¡Qué pésimo sustituto eligen los que cometen la injusticia [de la incredulidad en Dios]!" [Corán, XVIII, 50]
12) Evangelio según San Mateo, 4
13) En 1577 el médico holandés Johannes Weyer publicó una variante del Goetia bajo el título Pseudomonarchia daemonum, traducida más tarde al inglés por Reginald Scot e incorporada al libro decimoquinto de su Discoverie of Witchcraft. Goetia era la primera parte del Legemeton o más conocido como Lemegeton Clavicula Salomonis (en español, La llave menor de Salomón (1584).
14) Originalmente la presencia de familiares estuvo ligada a la magia ceremonial.
 

martes, 10 de enero de 2017

The Arabic Hermes: From Pagan Sage to Prophet of Science



Sólo algunas pocas personalidades ficticias dejaron una huella tan duradero en las culturas de Eurasia y del norte de África, como lo hizo Hermes Trismegisto. Lo podemos encontrar en la imaginación de los pueblos antiguos y medievales del Cercano Oriente, África del Norte, Europa, Asia Central, Sudeste de Asia, y más allá como un dios, un salvador, un profeta, un científico, poseedor de conocimiento ocultos, y autor de numerosas obras que van desde la química a la medicina de los talismanes, y la as revelaciones divinas de tiempos inmemoriales. Las corrientes de pensamiento hermético (a veces como una religión y otras veces como filosofía) y la literatura le atribuyen a este personaje un lugar destacado, no sólo en el pensamiento pagana tardío, sino que también en el Cristianismo y en algunas escuelas del Islam, jugaron además un rol en el ocultismo judeocristiano-islámico desde los tiempos medievales. No es sorprendente, por lo tanto, que Hermes ha sido un tema de interés tanto popularmente como académicamente en el siglo XX. Sin embargo, todavía carecemos de las bases necesarias que nos permitan tener una comprensión más matizada y compleja de Hermes y el Herméticos, e iluminar mejor las interacciones entre las culturas en la vasta geografía de Eurasia y el norte de África. Mediante el estudio de las representaciones de Hermes en el vasto corpus literario árabe medieval, Kevin van Bladel aporta una cantidad importante en el conocimiento, en un tema que como comentamos, que se distinguen por las lagunas a la hora de abordarlo.

Dividido en seis capítulos en dos partes (la introducción y la conclusión incluidas) El árabe Hermes representa la respuesta del autor a las siguientes preguntas: ¿Quién realizo los primeros escritores árabes sobre Hermes Trismegisto, y cómo se llegan a estas ideas?. La introducción, es una revisión historiográfica que nos ofrece una breve reseña de la recepción de Hermes en la Europa latina antigua , con miras a facilitar al lector la comprensión del tema principal del estudio, que es la figura de Hermes en el mundo árabe. Dada la confusión terminológica en el ámbito académico, el autor aclara debidamente en la introducción cómo utiliza los términos "hermetismo", "hermético" y "tradición hermética".

En el Capítulo 2 sostiene que la imagen árabe más antiguo de Hermes se originó en el Irán sasánida a través de traducciones del persas medio de Hermetismo, textos que general trataban asuntos de astrología, lo que explica por qué su nombre se asoció primero con la astrología, cuando los burócratas abasíes de orígenes persa comenzaron a interesarse por este tema desde mediados del siglo VIII en adelante. Gracias a la reactualización por el persa medio de Hermes, como un sabio babilónico que enseñó a los egipcios las ciencias;  la adopción del griego y de las ciencias de la India en la post-alejandrina Persia, fue vista como un acto restauración del conocimiento que Alejandro había destruido y dispersos, conocimiento que había sido patrimonio de Irán. El hecho de que esta leyenda fue articulada por burócratas persa bajo los abasíes, que por cierto se encuentran entre las principales fuentes de nuestra información sobre Hermes y la Hermética en el Irán sasánida, da testimonio de su importancia para las realidades políticas y sociales del califato abasí del siglo VIII.

El capítulo 3 está dedicado a helenístico Harran, como la imagen de Hermes. que nos aporta otro contexto intelectual que se perfilo en la literatura árabe. Alrededor de 600 C. E. el pueblo de Harran parecen haber venerado Hermes como uno de los antiguos filósofos y hombres santos paganos. A principios del siglo IX, como es testimonio por Theodore Abu Qurra, Hermes era había sido elevado al nivel de profeta, por los paganos adoradores de los astros de Harran. Sin embargo, Van Bladel señala, que por importante que halla sido el papel de la tradición de Harran en la aparición y desarrollo de la imagen de Hermes en la literatura árabe, esto no puede ser probado debido a la falta de evidencia textual hermética griego perteneciente a la mencionada tradición. Aquellos pruebas que afirma que de Harran, vino el Corpus Hermeticum o los textos relacionados al hermetismo mencionados por al-Kindi, ahora han sido puestas en duda, en la actualidad no se puede atribuir a Harran con cualquier grado de certeza ser la fuente de dicho conocimiento. Van Bladel llega a la conclusión de que, dada la falta de familiaridad de los filósofos musulmanes con los diálogos herméticos griegos, si los filósofos musulmanes tuvieron alguna deuda con la tradición de Harran, esta tuvo que ser menor.

Los que convirtieron a Hermes en una figura central en el periodo islámico medieval fue Abu Ma'shar, para quién existieron tres Hermes: el Antediluviano Hermes, el profeta de la ciencia y un Hermes posteriores que recupero las enseñanzas de los dos anteriores.



Hayrettin Yücesoy



Yerko Isasmendi 

lunes, 9 de enero de 2017

El Taqlid ciego del Salafismo



Las personas que siguen sus deseos y opiniones que están en conflicto con la Sharia se describen en el Sagrado Corán como los seguidores de Hawaa (instigadores del Nafsani). Estas personas, que se escriben asi mismas como intelectuales de razonamiento independiente, son en realidad más ciegas que los seguidores. Pues, siguen a sus deseos, abandonando una forma superior de seguimiento [taqlid de los Salaf-as-Saaliheen(1)] por el taqlid de su nafs(2). Ellos sufren de la enfermedad de la visión oblicua, lo que los hace peor que los ciegos.

Aquellos que critican a los ilustres Imames de los cuatro madhahib de la Sunnah, y renuncian al concepto islámico de taqlid, han colocado alrededor de su cuello el taqlid de su nafs. Ellos trabajan en el auto-engaño sin siquiera comprender su desviación. Pretenden dar la impresión de que son hombres de un profundo conocimiento, por lo cual, no tienen ninguna necesidad de seguir el A’immah-e-Mujtahideen, tales como el Imam Abu Hanifa, Imam Malik ibn Anas, etc; engañan a la gente ignorante para que estas crean que poseen la capacidad de interpretar el Sagrado Corán y el Hadiz, y deducir los problemas sobre la base de la sharia en base a su auto-estudio. Pero este taqlid es de la peor especie. Ellos han rechazado seguir las autoridades que adquirieron sus conocimientos de los Sahabah Ikram. Se sienten orgullosos de su taqlid de Ibn Taymiyah (d. 782 AH) o de Ibn al-Qayyim Jawziyyah(3), que aparecieron siglos después de los ilustres A'immah-e-Mujtahideen. Aunque se sienten mujtahideen capaces de interpretar y entender el Corán y el Hadiz, hacen taqlid de Ibn Taymiyah, que es el límite de sus conocimientos. Ellos no tienen otra fuente de conocimiento. Sea cual sea la interpretación de Ibn Taymiyyah presente, es ciegamente y estúpidamente aceptada por la Ghairi muqallideen quienes se conocen como "salafistas". Pero ellos no tienen ninguna relación con los nobles Salaf-as-Saaliheen. Ibn Taymiyyah no estaba entre los Salaf-as-Saaliheen, por lo que este título es un nombre inapropiado para aquellos que han adoptado el seguimiento ciego de su nafs.

El comienzo y el final de los conocimientos de los salafistas que se atribuyen a sí mismos es Ibn Taymiyyah; quién apareció en el horizonte Islámico siete siglos después de Sayyidina Rasulullah (Sallallahu ‘Alaihi wa Sallam) y cinco siglos después del Imam Bujari (Rahmatullahi' alaih). Muchos, si no todos, los salafistas recogen su interpretación del Hadiz de los escritos de Ibn Taymiyah, pero reclarán que sus opiniones son el producto de su estudio del Sagrado Corán y el Hadiz.

Mientras que denuncian el taqlid superior de los Salaf-e-Saliheen, fácilmente abrazan la taqlid de Ibn Taymiyah. Peor que esto, es que hayan designado como su Imam a Nasiruddeen al-Albani, quién no posee un rango en el conocimiento de la Shar'iah. Al-Albani era un hombre de este siglo que murió algunos meses atrás (1999 dC). Así, mientras que descaradamente rechazan el taqlid, han adoptado el taqlid de estudiantes de tercera. Mientras que denuncian el taqlid de los estudiantes de los Sahabah y los estudiantes de los Salaf-e-Saliheen (Tabi'een y Taba’at-Tabi’een), abrazan el taqlid de los que no tienen en absolutamente ninguna comparación con el rango y estado de los Salaf-e-Saaliheen, radiyallahu ‘anhum ajma’een.

Todos los musulmanes saben que Rasulullah (Sallallahu-\'Alayhi-Wa-Salam) describió tres épocas como el Jairul Quroon (edades más noble). Estas son las épocas cercanas a la era de Rasulullah (Sallallahu ‘Alaihi wa Sallam). Estas fueron las edades de los A'immati Mujtahideen, juristas, muhaddizin, exegetas, y todas las grandes almas de al-Islam. Estas son las edades de los Sahabah, Tabi'een y Taba'at Tabi'een. Las ilustres autoridades de estas edades se llaman los Salaf-us-Saliheen.

El grado de ceguera espiritual de los auto nombrados salafistas ahora se puede medir. ¿Qué justificación islámica requiere un hombre para rechazar y denunciar el seguimiento (taqlid) de los Salaf-us-Saliheen y sustituirlo por el taqlid miserable de nulidades incompetentes? ¿Cómo pueden los musulmanes que se jactan de su inteligencia rechazar el taqlid del awliya y del A'immah de la época de Jairul Quroon y aprobar el taqlid de hombres que no poseen la calidad y el carácter de un wali de Allah.

A pesar de que dicen estar siguiendo el Sagrado Corán y la Sunnah, siguen ciegamente los escritos de Ibn Taymiyah y sus opiniones, interpretadas por al-Albani. Se apresuran a asegurar que la obtención de sus reglas está basada en el Hadiz, pues carecen de la valentía de afirmar que están siguiendo la Sunnah en la forma que Ibn Taymiyyah la entendio. De hecho, algunos de ellos tienen acceso a las obras [reales] de Ibn Taymiyah. Pero prefieren simplemente seguir ciegamente a Al-Albani y a otros que han designado como sus imames, sin embargo, son vociferantes en su denuncia del taqlid Islámico del A'immat-i-Mujtahideen de la era de los verdaderos Salaf.

Los salafistas se apresuran a citar al Imam Bujari (Rahmatullahi ‘alaih) y los sabios del Hadiz competente como prueba de sus opiniones que están deducidas de los escritos de Ibn Taymiyah. Mientras que citan al Imam Bujari (Rahmatullahi ‘alaih), siguen la interpretación del Hadiz ofrecida por Ibn Taymiyah y comentada por el modernistas Al-Albani.

No se dejen engañar por quienes denuncian el taqlid de los juristas, y awliya de Allah. Pues, están en realidad rechazando el concepto mismo de taqlid. De hecho, están denunciando a los ilustres predecesores, los SALAF-E-SALIHEEN. Parecen poseeer una profunda aversión por estos predecesores, por lo tanto, los crítican. Pero ellos -los salafistas - también siguen, sin embargo, lo hacen ciegamente, pues le ofrecen un taqlid ciego a Ibn Taymiyah, a Al-Albani, a Ben Baz. Y siguen las Madhhabe-Taymiyyah, Baaziyyah, Albaaniyyah y Wahhaabiyyah.

Su crítica dura hacia los A’immah Mujtahideen no es más que el cumplimiento de una predicción hecha por Sayyidina Rasulullah (Sallallahu 'alaihi wa sallam) quien dijo que entre los signos de los Qiyamah es que la gente insultará a los precursores piadosos (Salaf-us-Saalihin) de otros tiempos. Esto es lo que precisamente están haciendo estos pervertidos. La gente inteligente no se sorprendió por la actitud miserable de aquellos que denuncian a los Imames de los cuatro madhahib de Ahlus Sunnah y a los Awliya de Allah.

Debe ser bien entendido que en todas las esferas de la vida, ya sea mundana o espiritual, el taqlid es indispensable, como los salafistas se están mostrando por su Tariqat de seguir ciegamente a sus imames. Las denominaciones adecuadas para los denunciantes modernista del taqlid son "Albanis" o "Baazis," pero no salafistas. No hay ninguna relación entre ellos y los Salaf-us-Saliheen.

En presencia de los Ulamas [y gente educada] de Ahlus Sunnah, los salafistas pretenden honrar y respetar los A'immah de los cuatro madhahib. Sin embargo, cuando ellos predican a los laicos incautos e ignorantes, derraman su veneno oculto contra los Imames Saalihin en general y en particular sobre el Imam al-A’zam Abu Hanifah (Rahmatullahi Ta’ala ‘alaih).

Al Adaab: Living Islam According to the Minhaj of the True Salaf as Salihoon
Yerko Isasmendi 





Notas

1) Salaf, en árabe, significa literalmente predecesores. La definición Islámica del Salaf-us-Saalihin (Saalihin predecesores) define tres, y sólo tres generaciones de 'Ulamas que han expuesto la Ley Islámica (Sharia): I.) Sahaba Ikram, II) Tabi'een, III).. Taba'at-Tabi'een.
2) Deseos carnales.
3) Ibn Qayyim al-Jawziyya, uno de los estudiantes de Ibn Taymiyah. No se debe confundir con Ibn al-Jawzi (Abu-l-Faraj ibn al-Jawzi, el Alim Hanbali.

viernes, 6 de enero de 2017

Lectores Masnavi y los principios de la enseñanza del Masnavi



Ellos (los Mevlevis) solían  llamar a la lectura en voz alta del Masnavi y la explicación de su significado "Masnavi-Khwani" y el recitador del Masnavi era llamado Masnavi-Khwan [Mesnevi han ,en turco] lo que significa la interpretación.

Para la enseñanza del Masnavi [ijâzat-nāma] se requería tener una certificación, la cual requería como requisitos aprender el Persa, o saberlo o conocer el estilo de los libros persas y haber participado en  las lecciones del Masnavi por un tiemp. Incluso si no se era miembro de los Mevlevis era posible optar a un certificado dado por un Mesnevihan.  Y el Chelebi(1) o cualquier otro líder Mevlevi - un sheij que pudiera recitar la plegaria llamada "Takbir"(2) y que usaba un sikka(3) - podía conferir el permiso de usar un turbante que denotaba la posesión de dicho conocimiento(4).

El Masnavi fue recitado desde los tiempos de Mevlana, pasando dicha tradición por su sucesor Husamuddin Chelebi y (su hijo) Sultan Walad. Siendo recitado junto a odas (ghazaliyyât) y al Corán en el lugar de descanso de Mevlana y ocupando el lugar central en la ceremonia del Salam.

Pero en la época otomana un rígido fanatismo, una mentalidad superficial y la rivalidad política que existían entre Persia y el Imperio Otomano llevo a la búsqueda de ventajas de los conflictos religiosos entre los dos países, lo que desemboco en agrandar las diferencias entre estos dos reinos; por lo cual, en forma paulatina la lengua persa comenzó a ser vista como ofensiva. En este clima todo aquel que hablará persa era considerado como alguien que estaba estaba bajo la influencia del imperio Safavida y al estar asociada la lengua persa al campo de sufismo [tasawwuf] - estos solían ser acusados de cripto shiitas. Los niveles de fanatismo y odio contra la lengua persa llego al extremo del surgimiento de frases como esta: "El que habla persa regala la mitad de su religión." o "que la lengua del shaitan es la persa"

Sin embargo en esta época, ni los recitadores, ni el Masnavi se quedaron delegados  en "cuatro paredes".Gracias a la determinación [himmat] de los líderes espirituales [mashâyikh], una nueva expansión del persa comenzó a ganar terreno, lo que llevo a la aparición de las bibliotecas llamadas "Casas del Masnavi" [Daru 'l-Masnavi], las cuales tenían como misión enseñar el Masnavi para así perpetuar su legado. La última "Casa del Masnavi" que abrió sus puertas en Estambul fue la Daru 'l-Masnavi y la Biblioteca de Mulla Murad en 1778, en el barrio Chahârshamba en Fatih, Estambul.

En los edificios Mevlevi [Mavlavi-Jana] durante el día prevista para la ceremonia de la Oración en giro [muqabala], después de la oración colectiva [Namaz], el Masnavi era recitado en nombre de la (espiritual) del maestro [shaij] y explicada (por él) en la "Silla Masnavi" [kursî-yé Masnavi](5). Un Dede(6) se sentaba frente al sillón y recitaba cuatro o cinco versos del Masnavi(7). El shaij entonces los traducía al turco, partiendo del primer verso, y luego procedía a su explicación(8).

En los viejos días, era deber del lector del Masnavi [qâriy-é Masnavi] recuperar de su memoria los versos que había aprendido a modo de enseñanza, cuando  el shaij no disponía de papel o de un libro, En dicho caso la práctica era que el Masnavi fuera recitado de memoria. Aqellos que habian memorizado todo el Masnavi eran llamados "Hafiz-An-e Masnavi".

Para finalizar citaréque un ejemplo de los certificados escritos [ijâzat-nāma] para la enseñanza el Masnavi [de los cuales uno se conserva en árabe]:

- "En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Más Compasivo (Todos) el elogio son para Allah y permita que sus bendiciones sean sobre Su Profeta y sobre toda su familia ahora para comenzar:.. Me ha sido dado permiso por el Shaykh Sayyid `USmân SalâHuddîn al-Mawlawî de transmitir el libro de Al-Masnavî Al-Ma`navî en la medida en que el comentarista [turco famoso del siglo 17] Anqaravî ha investigado [del Masnavi] - tanto como yo mismo adquirí de mi maestro Khwâja Amînuddîn Husaynî y de su maestro Khwâja Salîm al-Naqshbandî, que Allah santifique sus secretos y que podamos beneficiarnos de sus conocimientos. Amén. Yo soy el Faqîr Hasan Husâmuddîn al-Masnavî-Khwân. Se me dado permiso de la misma manera que a mi shaykh se le dio de recitar las nobles letanías * y los nobles significados espirituales del  Masnavi [masnawiyu 'l-sharîfu 'l-ma`navî] - puede que fluya al fin para siempre! ". No siendo como la astrología, la geomancia o los sueños; ya que viene de la inspiración de Allah - y Allah sabe mejor lo que está bien(10)"
[El sello del maestro se colocó en el certificado]



Yerko Isasmendi 



Notas:

1) La Chelebi: el líder hereditario de la orden Mevlevi, que es un descendiente de Rumi.
2) La "Takbir" [Takbir, pronunciado "tekbeer" en turco]: Allah es el Más Grande! Allah es el Más Grande! No hay divinidad excepto (el) Allah. Y Allah es el Más Grande! Allah es el Más Grande! No hay divinidad excepto (el) Allah. Y a Allah son (todas) las alabanza! [Allahu akbar, Allahu akbar, la ilaha illa llah, w-Allah akbar, Allahu akbar wa li-Llahi 'l-Hamd]
3) Sombrero [sikka]: la altura del fez Mevlevi de  color miel.
4) Turbante [Dastar]: un fez que se envuelve (en la parte inferior, en el nivel de la frente del usuario) con una longitud de tela de turbante.
5) La "Cátedra Masnavi" [kursî-yé Masnavi]: un lugar elevado desde donde el líder Mevlevi [shaykh] explicaría el significado del verso recitado del Masnavi. O tal vez un lugar especial donde se guardaba el Masnavi, envuelto en una cubierta de tela especial.
6) Dede: una palabra turca que significa abuelo, viejo, shaykh. En la tradición Mevlevi significa alguien que ha completado el retiro de un 1001 días y, a continuación se ha especializada en el arte,  como la música o la caligrafía  o  en la recitación Masnavi.
7) Un Masnavi-Khwan era alguien que recita el Masnavi desde el original persa.
8) Un lector Masnavi [qâriy-é Masnavi] que recita el Masnavi en la traducción turca.
9) El (la oración llamada) Fatiha: el famoso capítulo de apertura del Corán. 
10) în-chon-în farmûd mawlânâ-yé mâ kâshif-é asrâr-hâ-yé kibriyâ: na najûm-ast-o na raml-ast-o na khwâb waHy-é Haqq w-allâhu a`lam bi 'S-Sawâb [--Masnavi, Book IV: 1852]


El Tercer ojo en la vía mística cristiana



La esencia de la enseñanza de Hugo de San Victor es que el mero conocimiento no es un fin en sí mismo; no debiera ser otra cosa que un estriberón hacia la vida mística a través del pensamiento, meditación y contemplación; el pensamiento busca a Dios en el mundo material, la meditación lo descubre dentro de nosotros mismos y la contemplación lo conoce sobrenatural e intuitivamente. Esos son los “tres ojos” del alma racional.

Según este teólogo y místico medieval al salir del paraíso el ojo corporal (realidad sensible) quedó debilitado, perturbado quedo el ojo racional (realidad que me revela la razón) y ciego el ojo de la contemplación (visión religiosa y mística). Si no se cultiva este último ojo, permanecerá ciego. Estar fuera del paraíso es exactamente esto: no percibir ya la Presencia, carecer del órgano capaz de experimentar, de "ver" a Dios, al que-es, al que-está-con. La cultura occidental, que ha desarrollado preponderantemente el ojo de la razón, sufre ahora esta ceguera de un modo especial.

El cartujo Guigues II (+ 1188) al hablar de los 4 peldaños de la escalera espiritual (Scala Claustralium) decía: "En efecto, la lectura (lectio) es la inspección cuidadosa de las Escrituras con entrega de espíritu. La meditación (meditatio) es la concentrada operación de la mente que investiga con la ayuda de la propia razón el conocimiento de la verdad oculta. La oración (oratio) es la fervorosa inclinación del corazón a Dios con el fin de evitarle males y alcanzar bienes. La contemplación (contemplatio) es la elevación de la mente mantenida en Dios, que degusta las alegrías de la eterna dulzura"


Yerko Isasmendi


miércoles, 4 de enero de 2017

Influencia europea en la brujería criolla



Sería fácil sentirse tentando en querer ver alguna rebuscada influencia de cultos ofidianos orientales(1) en la presencia del culebrón, que en los procesos por brujería ya en el siglo XVII tiene en una posición de igualdad con el macho cabrío. Pero no existe ningún dato que nos permita tal licencia; aunque si es interesante hacer notar los paralelismos que se pueden detectar en cosmovisiones que probablemente tuvieron algún tipo de contacto con la población de Chile, los cuales nos pueden ayudar a conjeturar la significancia que pudo tener para los brujos chilenos este ser o entidad. Hay dos zonas de España que además de poseer una larga tradición brujeril, guardar estrechas semejanzas con las creencias y prácticas de la brujería en Chile; me refiero al País Vasco(2) y a Galicia.

La serpiente ha jugado por siglos un rol central en la antigua cosmovisión vasca, siendo Maju o Sugar(3) el esposo de Mari(4), un culebrón asociado a las tormentas y truenos que tiene su morada junto a su esposa en lo profundo de las cuevas. También en las leyendas hay referencias a genios con forma de serpientes, como el Herensuge. Pero hay un relato en las creencias vascas que habla de una cueva en el monte Auza, en la región de Baigorri; en donde un tesoro es custodiado por una serpiente y un macho cabrío(5); que nos recuerda inmediatamente lo relatado por los acusados de brujería en Chillán en 1749, donde declararon ante notario que las reuniones a las cuales habían asistido se llevaba a cabo en una cueva en la cual había un «culebrón (Iwaifilu(6))  y un chivato pillán».

Al igual que el relato vasco de la cueva en el monte Auza, este culebrón cumple labores de guardián, como queda graficado en los testimonios del proceso de Chillán de 1749 «todos cuantos entraban en la cueva debían detenerse ante un culebrón grueso que se les sube por las piernas asta llegar a la corona de la cabeza como asiendo alagos a todos los que an pasado” y “les oscula el rostro y después se baja en la misma conformidad y que entonses se supone entonses se supone lizensia para de entra adentro de la cueba donde están los que dentraron primero»(7).

Esta manifestación corpórea de entidades demoníacas en forma de grandes serpientes como porteros de los reinos mágicos y ligados a la brujería también aparece en procesos de brujería al otro lado de los Andes. Eduardo Valenzuela Avaca(8) al respecto nos señala que en el proceso llevado a cabo en Santiago del Estero contra la india Lorenza en 1761, ella testificó «la presencia de un enorme "viborón" que actuaba como portero de la cueva, y que solicitaba a las asistentes, como parte de los requisitos de ingreso, que «le diese de su sangre». Lo cual no nos debe de extrañar, debido al papel que ocupaba la serpiente en el pensamiento mágico religioso de las diversas culturas autóctonas de la zona, siendo Amaru en el pensamiento andino,  la mediadora entre el cielo y la tierra, símbolo de la sabiduría y de la vida. 

Recordemos que en las creencias incas que tiñeron el pensar religioso de buena parte de los andes, la serpiente moraba en Ucu Pacha o mundo subterráneo(9)-  al igual que el Sugar vasco - lo cual nos remite a la función de portero a un mundo mágico subterráneo. La aparición del macho cabrío y la relación con la brujería sin duda se deben a influencias europeas, específicamente vascas en donde la tripleta cueva-macho cabrío-bruja, devinieron en el estereotipo de la reunión brujeril a lo largo del mundo cristiano.


Yerko Isasmendi 

Parte IV - Parte VI



Notas

1) Ver "The Cult of the Serpent. An Interdisciplinary Survey of its Manifestations and Origins" de Balaji Mundkur, editado por la State University of New York, 1983.
2) No debemos olvidar que el país vasco fue una de las zonas con fuerte resistencia a la evangelización, lo que llevo a que las antiguas creencias se mantuvieron intactas por siglos, terminando estas por fundirse con la nueva religión. 
3) Surge es la palabra vasca para serpiente.  
4) Mari es la deidad principal de la mitología vasca, conocida en todos los rincones de Euskal Herria. Es la figura central del panteón mitológico vasco, la manifestación de las fuerzas de la naturaleza divinizadas. 
5) Leyenda relatada por Juan Monako del caserío Biurretabuxtan: En el monte Auza existe una caverna que contiene oro en su interior. Junto al oro se hallan una enorme serpiente y un macho cabrío. El cura de Martiene de Aldudes estuvo allí muchas veces y veía el oro, la serpiente y el macho cabrío. Por lo que, recitaba las oraciones de su libro al fin de ahuyentar la serpiente y el buco. Con las oraciones del cura la serpiente adelgazaba como una hebra, pero no huía.
6) Guaybilo.Sobre esta voz, la lingüística misionera nos provee alguna información. El Arte y gramática general, publicado en 1684 por el jesuita Luis de Valdivia, registra dos entradas que podrían estar vinculadas a esta voz: Ihuay traducido como serpiente, y la entrada Bilu o culebra. Por su parte, la obra del padre Andrés Febre, también jesuita, contiene significativas precisiones a los términos. Aunque la voz Ihuay figurará con un contenido restringido a «víbora, culebra» (Febres Andrés, 1765: 520), la entrada Vilu abrirá su significado para transformarse en la traducción de un término categorial «culebra, y las lombrizes, vívoras, y otras cosas así» (Febres Andrés, 1765: 661). En un giro de especificidad, Febres registrará la voz competa, ihuayvilu, traduciéndola, significativamente, como dragón.
7) Diablos, brujos y espíritus maléficos. Chillán, un proceso judicial del siglo XVIII”, Holdenis Casanova Guarda.
8) Las fronteras del entendimiento en la frontera mapuche: brujería, justicia y traducción cultural en Chile durante el siglo XVIII.
9) La Serpiente en los Andes Prehispánicos de Lorenzo W. Tacca Quispe

Ahlul Kis'a en las fuentes sunnitas




Allah Subhana wa Taala nos ha ordenado amar a la familia del Santo Profeta (Sallallahu alaihi wa sallam) a través del Sagrado Corán - (Sura Shu'ra-23). "No os pido recompensa por ello, excepto el amor a los familiares"

Se menciona en dicho Hadiz, dar instrucciones a sus hijos en tres cosas: el amor del Santo Profeta (Sallallahu alaihi wa sallam), el amor de su Ahlut Bait y la recitación del Sagrado Corán.

Allah Subhana wa Ta´ala dice en la Sura Ahzaab (33): "Ciertamente, Dios quiere apartar de vosotros la impureza ¡Gente de la Casa! y purificaos absolutamente".

Este versículo del Sagrado Corán establece que Ahlut Bait ha sido protegida de todo tipo de manchas, ya sean defectos intelectuales o los defectos de la creencia.

Dice Suiutí (destacado sabio de la escuela sunnah), en su obra Ad-Durrul Mansur: “Cuenta At-Tabarani de Umm Salamah (una de las esposas del Profeta) que el Mensajero de Allah (Sallallahu alaihi wa sallam) le dijo a Fatima (Que Allah Subhana wa Taala este complacido con ella): ‘Tráeme a tu esposo y a sus dos hijos’. Ella los trajo y entonces el Mensajero de Allah (Sallallahu alaihi wa sallam) extendió sobre ellos un manto fadakí que los cubrió; luego colocó su mano sobre ellos y dijo: ‘¡Dios mío!. Por cierto que ellos son la gente de Muhammad -y según otra versión lafamilia de Muhammad-. Dispón Tus bendiciones y gracias sobre la familia de Muhammad, así como lo hicistecon la familia de Ibrahim. Ciertamente que Tú eres Loable y Glorioso”.

Dijo Umm Salamah: “Levanté el manto para entrar junto a ellos y él (PBd) lo estiró de mi mano y dijo: ‘Tú tienes tu situación y en ella estás bien’” (At-Tirmidhi, Tomo II; Manaquib Ahlul Bait, pág. 308)

En otra versión

También fue narrado por Umm Salamah que el Mensajero de Allah (PBd) estaba en su casa, en su lecho, y tenía sobre él un manto de Jaibar. Entonces llegó Fatima (P) con una olla con jazira (un tipo de comida), y el Mensajero de Allah (PBd) le dijo: “’Llama a tu esposo y a tus dos hijos Hasan y Husain’.

Ellos fueron y mientras estaban comiendo le fue revelado al Mensajero de Allah (Sallallahu alaihi wa sallam): «...Allah sólo quiere alejar de vosotros la impureza, ¡Ahlul Bait!, y purificaros de sobremanera» (Corán; 33:33)

Entonces el Profeta (PBd) los cubrió con el manto y luego sacó su mano a través de él y señalando al cielo, exclamó: ‘¡Dios mío!. Ellos son la Gente de mi Casa y mis más íntimos. Aleja de ellos la impureza y purifícalos completamente’ (dijo esto tres veces)”.

Continúa narrando Umm Salamah: “Metí la cabeza bajo el manto y dije: ¡Oh Mensajero de Allah!. ¿Me incluyo entre vosotros?. Respondió: ‘En donde estás, estarás bien’ (lo cual repitió dos veces)

(El Hadiz fue narrado en Gaiatul Maram a través de Abdullah Ibn Ahmad Ibn Hanbal por medio de tres caminos diferentes que llegan a Umm Salamah. También fue citado en Tafsir Az-Za’labi. En él Ibn Mardwiah, y Al-Jatib lo narran de Abu Sa’id Al-Judri con ligeras diferencias en las expresiones utilizadas.)


Yerko Isasmendi 

martes, 3 de enero de 2017

Los caraítas: una secta judía medieval



Al igual que en el Occidente Cristiano, el Judaísmo en el medievo gozaba de fuertes estructuras de autoridad espiritual, establecidas por su solido corpus conformado por textos y tradiciones. En dicha época, ciertas fuerzas propiciaron el cuestionamiento de las instituciones sociales y los dogmas fundamentales de la tradición rabínica. De dicho proceso de re-lectura doctrinal, dos movimientos se destacan: El Caraísmo y el activismo mesiánico. La "herejía" Caraíta tiene una larga historia, incluso hoy en día hay cerca de siete mil Caraítas viviendo en Israel, los que mantienen su separación, efectuando sus matrimonios solo dentro de su comunidad. Pero fue sólo durante la Edad Media donde realmente constituyen una alternativa al judaísmo rabínico.

Los Caraítas son mencionados por primera vez en fuentes escritas en el siglo VIII. Ellos mismos dicen ser descendientes de las sectas disidentes del período del Primer Templo, y por parte de la tradición rabínica, se les remonta a las tendencias de oposición de la época del Segundo Templo. Aunque no es posible demostrar ninguna afiliación directa a cualquier secta particular de la antigüedad, esto no excluye la posibilidad de prestamos por parte de los Caraítas de algunas costumbres y formas de organización de algunas sectas judías de Persia.

Los inicios de la actividad Caraíta se asocian con la figura de Anan ben David, un hombre culto y aristocrático que probablemente perteneció a una familia de Exilarcas, los líderes de la comunidad judía de Babilonia. Sus seguidores inmediatos fueron un pequeño grupo de intelectuales que formularon los dogmas de la secta, los cuales fueron predicados en centros judíos en todo el califato musulmán, incluida Palestina. En los siglos X y XI, las comunidades Caraítas estuvieron protegidas varios eminentes miembros de la secta que habían alcanzado posiciones influyentes en la corte del rey. Dirigido por un Nasi (príncipe) que reclamaba un linaje davídico, los Caraítas atrajeron a muchos estudiosos de la exégesis bíblica, del derecho, de la lexicografía hebrea y de la filosofía.

La mejor parte del esfuerzo intelectual Caraíta, estuvo dirigido a demostrar los errores de los Rabanitas. Su agudeza crítica y conocimiento profundo de las doctrinas rabínicas, les aseguraron un alto nivel en sus polémicas. Además su ataque religioso estuvo acompañado por la crítica social hacia los líderes judíos, los exilarcas, los gueonim (jefes de las academias), y los dignatarios que los rodeaban.

La influencia islámica fue evidente en todos los aspectos del Caraísmo, en su perspectiva filosófica, en sus puntos de vista espirituales, en las costumbres, las leyes y los procesos judiciales. La principal característica de los Caraítas es su rechazo a la autoridad  de la Ley Oral y la creencia en la necesidad del estudio directo, independiente y crítico de la Biblia. Un "Caraíta" lee el Mikra (el Pentateuco) y reconoce las Escrituras como la fuente exclusiva de la ley religiosa.

Este fundamentalismo bíblico era la base de toda su religiosidad, y los colocó de manera irrevocable en oposición al judaísmo talmúdico. Algunas de sus doctrinas y costumbres que los distinguieron de los Rabanitas, son la interpretación literal de las normas bíblicas relativas a la observancia del sábado, la celebración de las festivales de manera diferente, así como una marcada diferencia en el sacrifico ritual. Otros puntos a tener en cuenta son su severa postura en relación con la ley sobre el matrimonio entre parientes y su liturgia que es mayoritariamente bíblica

El ataque Caraíta no fue lo suficientemente potente como para demoler la ciudadela rabínica, pero tuvo éxito en el desquebrajamiento de sus paredes, pues la secta reclutó a muchos conversos. Hacia el final del siglo XI, la secta tenía adeptos en la mayoría de comunidades dentro del mundo musulmán y el Imperio Bizantino, en las zonas orientales del califato, en Palestina y Egipto, en el norte de África, en España, y en Asia Menor.

Los Caraítas, sin embargo, considera la dispersión una calamidad. Su doctrina subrayó enfáticamente la obligación de vivir en la Tierra de Israel. Los que residían en Jerusalén, oraban a sus puertas, sometiéndose a las prácticas severas de purificación, con miras a acelerar el fin de los días; pues sin estas no había ninguna esperanza de redención. De ahí la constante propaganda para un retorno a Sión. En consecuencia, entre los siglos IX y XI, las "rosas" - como los Caraítas constituían la mayoría de la comunidad judía en Jerusalén.



Yerko Isasmendi ®



domingo, 1 de enero de 2017

Francmasonería y esoterismo (Parte I)



Esta es la primera entrada de una serie de traducciones que persigue exponer un tema que no solo ha generado un amplio debate dentro de la masonería, sino que también ha definido dos formas de entender, y por ende, vivenciar dicha fraternidad, lo que nos habla de dos visiones irreconciliables que conviven dentro de la masonería, y que esta entrada persigue exponer. Por lo cual este tema lo expondré en una serie de traducciones de los exponentes más representativos de ambas posturas; comenzando con el articulo "La franc-maçonnerie et l'ésotérisme" de Roger Dachez, uno de los representantes franceses de la llamada "École authentique". que engloba a historiadores a menudo miembros de la masonería, que en base a un método científico de investigación, son muy críticos en cuanto al rol del esoterismo masónico(1).

La franc-maçonnerie et l'ésotérisme
.
Las relaciones que tiene la masonería con el esoterismo son problemáticas(2). Para describirlas, primero debemos definir la naturaleza de la institución masónica: ¿es ante todo una "sociedad esotérica", una sociedad iniciática -. y en este caso, ¿es lo mismo?, o ¿es un simple círculo intelectual o un grupo fraterno?. Los masones a lo largo del tiempo han formulado variadas respuestas, y por otra parte, los estudiosos de la masonería, no necesariamente están de acuerdo entre sí.

Los múltiples significados de la palabra esoterismo, ya se han mencionado, pero en este caso, tiene una característica especial, pues pareciera que en el trabajo masónico, el esoterismo oscila entre dos posturas principalmente:

- En primer lugar el secreto, la noción de un conocimiento oculto por descifrar, una instrucción codificada que se escapa al profano: en este primer sentido, el esoterismo masónico se refiere a la disciplina clásica del arcano, que no convierte a la institución masónica en una "sociedad secreta" sino más bien selectiva.

- En segundo lugar, el esoterismo masónico no es separable de la dimensión de iniciación de la institución, que se supone debe dar lugar a una experiencia íntima, una liberación interior en este segundo sentido, el esoterismo masónico corresponde más a una gnosis.

Por lo tanto, es necesario identificar las verdaderas relaciones de la Francmasonería con el esoterismo, considerando algunas preguntas. En su famosa definición de la Masonería - uno entre muchas - W. Preston (1742-1818) distingue alegorías que "velan" y el símbolo que "ilustra" la masonería (Illustrations of Masonry, 1772). En los textos masónicos, ya durante el siglo XVIII, varios términos fueron utilizados a menudo como emblemas o incluso jeroglíficos. De hecho, nadie puede cuestionar que la Masonería hace abundante uso de imágenes y figuras a los cuales, se le da un sentido intelectual o espiritual más o menos preciso. Es, sin embargo, esto ¿esoterismo?

Por otro lado, uno de los rasgos más característicos de la Francmasonería es obviamente, el uso de rituales, basados en historias en torno a algunos personajes legendarios o míticos que son protagonizadas por el candidato. Es en este contexto, en donde el esoterismo ocupa un importante lugar, puesto que la dramaturgia de los grados se enseña en base a alusiones, lecciones vitales indirectas y sutiles. La masonería es por esto, en cierto modo, un ¿"teatro esotérico"?

Por último, si una parte significativa de la masonería, desde el siglo XIX, dice rechazar cualquier pensamiento dogmático, relativo a la "libertad de conciencia", queda claro que muchos sistemas masónicos han justificado su enfoque por una doctrina, más o menos definida. Si lo esotérico es una teoría antes que una praxis, hay que reconocer que en su historia la masonería ha revindicado a menudo un fundamento esotérico.

1. ¿Es la Masonería esencialmente una sociedad esotérica?

La masonería operativa, es decir, la masonería "de profesión, que existía en la Edad Media, es conocida por los textos del siglo XII, y mucho mejor por los del siglo XIII. Los documentos  más antiguos directamente relacionados con las logias operativas, los Old Charges, se remonta a finales del siglo XIV (Regius c.1390, Cooke c. 1420). Escrito por clérigos, enmarcan a los trabajadores dentro de las reglas de la vida cristiana, estando completamente desprovistos de cualquier contenido esotérico. Aparte de las prescripciones morales (Charges), contienen una historia de oficio, fabulosa, legendaria y mítica, que conecta, independientemente de la cronología o de la probabilidad; el trabajo de los constructores de catedrales, con los trabajadores de la Torre de Babel o del Templo de Salomón, puesto que estos, debían ser sus herederos y sucesores.

No sabemos casi nada de la vida y costumbres de los logias medievales. Sin embargo, parece que la introducción de un nuevo aprendiz o el reconocimiento a los trabajadores que confirmaba la condición de miembro, daba lugar a una ceremonia sencilla, que consiste esencialmente en un juramento sobre el Evangelio. Un texto inglés del siglo XVII, por ejemplo sólo contiene obligaciones puramente profesionales.

Sin embargo, a menudo se menciona el "secreto de los constructores" como uno de los tesoros transmitidos de generación en generación, el cual sería la fuente precisamente las logias medievales. Debemos ponernos de acuerdo sobre la naturaleza de este secreto. En un momento en que muchas oficios, incluido el de los albañiles, estaban fuertemente regulados y sus condiciones de trabajo se controlaban estrictamente; es lógica la preocupación por proteger lo más posible las habilidades profesionales para reservar el privilegio de empleo a los que eran dignos. Por lo tanto, una fuerte tendencia a no difundir los conocimientos técnicos y en particular a no dejarlos por escrito, habría sido muy útil en momentos en que casi todos los trabajadores eran incapaces de leer; la tradición oral, como una supuesta prueba infalible de la existencia de una tradición esotérica, no tiene probablemente ninguna otra razón!

Sin embargo, estas prácticas pueden explicar la aparición posterior de un significado esotérico, secundario a elementos que eran originalmente puramente convencionales y justificados por las necesidades del trabajo. Un ejemplo destacado es proporcionada por la institución, conocida en Escocia, al menos desde principios del siglo XVII, pero probablemente mucho más antigua, la Mason Word.

La Palabra de Masón en las logias operativas escocesas, era probablemente transmitida al recién recibido al grado de aprendiz, lo que le confería a estos trabajadores el estatus de "regular", distinguiéndose de los cowans, es decir, albañiles sin calificación y no reconocidos por la logia. Era un secreto puramente profesional. Sin embargo, en la práctica, atestiguada desde principios del siglo XVII, en Escocia, fueron recibidos como benefactores o miembros de honor, algunos notables locales (caballeros masones) a los cuales, se les dio la Mason Word - ya que no podían hacer ningún uso profesional de ella - se transformo gradualmente este secreto en enseñanza esotérica. En 1691, Robert Kirk, exponiendo diversas costumbres escocesas, escribe que la Mason Word es "un comentario a la tradición rabínica de Jaquín y Boaz, las dos columnas erigidas en el Templo de Salomón, dada a través de alguno signos secretos con la mano". En 1640, Robert Moray (c 1600-1673.), uno de los primeros caballeros albañiles de los cuales, la historia ha conservado su nombre, fue un artillero, ingeniero y anticuario; amante de las especulaciones esotéricas y es probablemente uno de las primeras semillas del esoterismo masónico, en el sentido del conocimiento oculto. 

La personalidad de Robert Moray es un emblema del resto del movimiento intelectual que, en el curso del siglo XVII, dio lugar a la aparición de la masonería especulativa, es decir, una masonería que en lugar de utilizar físicamente las herramientas de trabajo, las aplica a la vida moral. Es notable que Robert Moray también fuera en 1660 el primer presidente de la Royal Society. De hecho, en la Royal Society es donde aún se perciben los ecos del hermetismo-cabalístico renacentista, particularmente ilustrado por el movimiento de los Rosacruces, como tan acertadamente ha demostrado Frances Yates (The Rosicrucian Enlightenment, 1972). Es en este medio, que las especulaciones tomadas de un viejo fondo alquímico y mágico, ayudaron a dar forma al espíritu de la masonería especulativa y darle su tono esotérico, en sentido gnóstico.

Sin embargo, la masonería especulativa, que se organiza en Londres en 1717, con la fundación de la primera Gran Logia, ¿siempre se definió como una organización esotérica?. Es muy poco probable.

En uno de sus textos fundacionales, el discurso escrito por André Michel Ramsay (1686-1743) en 1736, en París, el joven masón francés especifica que la masonería "quiere conducir a todos los hombres hacia lo sublime, hacia un agradable estado de ánimo, hacia el amor por las bellas artes, donde la ambición se convierte en una virtud, donde el interés de la hermandad sea la de todo el género humano, donde todas las naciones pueden extraer conocimientos sólidos y donde todos los sujetos de diferentes reinos pueden actuar juntos sin celos, sin discordia y cuidarse el uno al otro. ". La afirmación de un linaje esotérico que se remonta hasta los orígenes de la humanidad en realidad aparecerá mucho más tarde, como más adelante veremos.

En Inglaterra, probablemente deberíamos esperar hasta finales del siglo XVIII, con la publicación de William Hutchinson (1732-1814) The Spirit of Masonry (1775), para un diseño esotérico-simbólico de la masonería de cierta repercusión. Sin embargo, los rituales ingleses no cesarán hasta hoy de enfatizar que el núcleo de los símbolos masónicos son esencialmente morales, los cuales representan alegorías convenciones más que secretos místicos, como lo expreso la definición de William Preston anteriormente citada.

Fue en Francia, en el siglo XX, en donde la la visión puramente esotérico de la masonería se teorizó de manera impresionante en la inmensa obra de René Guénon (1886-1951), la cual, hizo su debut en los círculos de ocultismo parisinos, los que incluían al mago Papus (1865-1916), que fundó  alrededor de 1887 una orden pseudo-masónico, el Martinismo y cuya doctrina un tanto confuso, fue expuesta en 1891 en su "Traité méthodique de science occulte", en donde se propone una síntesis entre "la sabiduría de los antiguos" y los primeros balbuceos de la ciencia moderna. El lema del movimiento, inscrito en la portada de la revista publicada por Papus, Le Voile d'Isis, era: Le surnaturel n’existe pas".

Rápidamente cansado de la incoherencia de este tipo de pensamiento, René Guénon, que tenia interés en el hinduismo, se sintió atraído por los círculos sufíes musulmanes que se habían instalado en París. Más tarde, recibirá el mismo la baraka y se verá influenciado de forma permanente por una visión de la historia de la religión y el mundo en general, tomada de una escuela de pensamiento cercana a los Hermanos Musulmanes, con una característica importante, la cual era la condena sin reservas del mundo moderno. Después de un corto período de tiempo - justo antes de la Primera Guerra Mundial - se alejará de forma permanente de las logias masónicas, centrándose en la publicación de numerosos libros y artículos en los que desarrollará su visión de la tradición primordial, postulando un esoterismo común a todos los pueblos de la humanidad y afirmando la degeneración absoluta de la era moderna (La crise du monde moderne, 1925; Le Règne de la quantité et les signes des temps, 1945). Aplicará sobre la masonería el mismo juicio, a pesar de no tener un buen dominio del tema, le dedicará el libro (Ecrits sur la franc-maçonnerie et le compagnonnage, 1964), en donde expresa la opinión de que esta una de las pocas organizaciones que tienen en Occidente la clave de un esoterismo universal. Sin embargo, critico severamente la desviación de la masonería, que a sus ojos, sobre todo en Francia, habían olvidado sus profundas raíces  y perdido el significado de sus propios símbolos. Afirmará además que la institución masónica, a través de sus grados, contiene un potencial esotérico, una "influencia espiritual" que tal como en Eleusis puede conducir al iniciado desde los pequeños a los grandes misterios; allanando el camino para una visión unitiva y de liberación. Paralelamente a esta valorización de la masonería, René Guénon no ceso de afirmar la necesidad para el masón iniciado, de un "exotérismo tradicional", es decir, profesar una tradición religiosa "regular" (lo que incluye a las religiones del libro), lo que conllevará a una profundización del esoterismo en ka masonería.

El pensamiento de René Guénon ha tenido una influencia duradera en una parte de la masonería francesa e italiana, entre otras. Sin embargo, tuvo un eco mucho menor dentro de la masonería anglosajona, la que en cambio, privilegia una lectura puramente moral o psicológica de los rituales masónicos.



Roger Dachez
Traducción: Yerko Isasmendi

Parte II


Notas

1) Los interesados en saber más de estas dos posturas, pueden consultar el libro  "À droite de l’acacia : de la nature réelle de la franc-maçonnerie?" de Stéphane François.
2) Este texto es, en esencia, la nueva traducción del artículo "Freemasonry" que publiqué en el Diccionario de la Gnosis y Esoterismo Occidental, Leiden, Brill, 2005. También sobre el mismo tema, se puede consultar el articulo "Franc-maçonnerie, escrito por JF Var en el Diccionario crítico del esoterismo, París, PUF, 1998. [nueva edición de 2013].